Da igual si la tienes por sus propiedades curativas o simplemente para añadir un poco de verde a tu casa: Aloe vera es una suculenta fácil que es ideal para cultivar en el interior. Pero, cómo cuidar un Aloe vera para que crezca bien?
Sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber sobre cómo cuidar un Aloe vera y el cultivo de esta suculenta en el interior.
Nombre(s) (común, científico) | Aloe, Aloe barbadensis, Aloe de Barbados, sábila, Aloe vera |
Nivel de dificultad | Fácil |
Nivel de luz | Algo de sol directo |
Agua | Cuando está seca |
Substrato | Substrato para suculentas |
Aloe vera: Habitat natural
Esta especie suculenta pertenece al género Aloe, que contiene más de 550 especies. Aloe vera se encuentra de forma natural en la península arábica, concretamente en el noreste de Omán, donde crece como una planta perenne.
Dicho esto, el Aloe vera se ha naturalizado en muchas zonas del mundo. Es resistente y se adapta a una gran variedad de regiones tropicales. Por ello, hoy en día se puede encontrar en la naturaleza en lugares como el norte de África, las Islas Canarias y la Península Ibérica e incluso partes de Asia.
Cómo cuidar un Aloe vera: Luz & temperatura
Luz
Al igual que la mayoría de las suculentas, Aloe vera está adaptada a entornos con una iluminación muy intensa. En tu casa, le irá bien un lugar bien soleado donde pueda absorber mucha luz.
Dicho esto, tu Aloe vera también sobrevivirá e incluso crecerá en lugares algo más oscuros, sólo que su crecimiento será más lento. Sin embargo, no te creas los numerosos artículos que aseguran que esta planta puede crecer en la oscuridad. Aunque no haya luz solar directa, tu Aloe necesitará al menos luz indirecta brillante.
Temperatura
Las variedades silvestres de Aloe vera se dan de forma natural en climas cálidos. Aunque esta planta puede aguantar un poco de frío, no ha evolucionado para soportar temperaturas bajo cero. Esto significa que puedes cultivarla en el exterior durante la mayor parte del año, pero tendrás que llevarla al interior si se prevén temperaturas inferiores a 5 °C.
Durante el verano, no te preocupes demasiado por tu Aloe vera. Puede sobrevivir temperaturas bastante altas y mucho sol siempre que el cambio no sea demasiado brusco. No te asustes si la planta adquiere un color marrón. Muchas suculentas se adaptan a la recepción de mucho sol cambiando de tonalidad.
Si las hojas de tu Aloe se vuelven muy marrones y parecen estar crispadas, trasládalo a un lugar más sombreado. Se trata de una quemadura solar.
Ubicación
De acuerdo con lo anterior, la ubicación ideal para tu Aloe vera es en el exterior durante el verano y en un alféizar bien iluminado el resto del año.
Asegúrate de proteger la planta de la lluvia excesiva si vives en un clima húmedo. Estará bastante sedienta en el exterior cuando haga calor y sol, pero necesita secarse entre riegos. Esto es especialmente importante durante los meses más fríos.
Cómo cuidar un Aloe vera: Substrato & (re)plantación
Substrato
Un factor muy importante que hay que tener en cuenta al cultivar cualquier tipo de suculentas es el substrato. Estas plantas están adaptadas a la sequía y sus raíces no soportan estar en un suelo húmedo durante largos periodos de tiempo. Esto significa que necesitarás un substrato que ofrezca buen drenaje para los mejores resultados.
Una buena mezcla básica de substrato para el Aloe vera consiste en un 50% de tierra para macetas sin turba y un 50% de material arenoso como la perlita. Puedes hacer tu propia mezcla con estos dos componentes.
¿Sabías que? Aunque el Aloe vera se utiliza por sus propiedades medicinales desde hace cientos de años, aún faltan más estudios científicos. Realmente no sabemos mucho sobre su eficacia y por qué funciona.
Surjushe, Vasani, & Saple, 2008; Hamman, 2008
(Re)plantación
Además de un substrato que drene bien, necesitarás una maceta con drenage para evitar que el agua se estanque. Esto significa que cualquier maceta en la que cultives un Aloe debe tener siempre al menos un agujero de drenaje en el fondo.
Puede que pase un tiempo antes de que esto sea preocupante si tu Aloe vera todavía es pequeña, pero aun así: recuerda que una suculenta adulta pesa mucho. Sus hojas llenas de agua pueden ser más pesadas que la maceta que utilizas, haciendo que se vuelque. Para los Aloes grandes, utiliza siempre una maceta pesada para evitar accidentes.
¿Buscas más información sobre la plantación de suculentas? Echa un vistazo a la guía completa de plantación de suculentas.
Cómo cuidar un Aloe vera: Agua & regar
La causa más importante de la muerte de plantas de interior en general es probablemente el exceso de riego.
Lo que muchos entusiastas de las plantas de interior ignoran es que la tierra de las suculentas debe dejarse secar por completo antes de volver a regar. Además, muchos olvidan que las necesidades de riego varían en función de la cantidad de luz, la temperatura y las estaciones.
Debido a lo anterior, no puedo decirte exactamente cuándo o cuánto debes regar tu Aloe vera. Lo único que puedo decir es que la tierra de la planta debe estar seca antes de que la riegues, lo que suele tardar más o menos una semana durante el verano. En el exterior puede ser menos, mientras que durante el invierno puede ser necesario regar sólo una vez al mes.
¿Necesitas más información sobre el riego de suculentas como Aloe vera? Echa un vistazo a la guía completa de riego de suculentas.
Cómo cuidar un Aloe vera: Abono
Si tu Aloe vera está sana y bien establecida, agradecerá un poco de fertilizante de vez en cuando. No hace falta que sea muy a menudo: muchos cultivadores de Aloe sólo fertilizan una o dos veces al año. El mejor momento para hacerlo es cuando la planta está creciendo activamente durante el verano.
Utiliza un abono especial para cactus para obtener los mejores resultados o opta por un alimento normal diluido para plantas de interior.
Propagar Aloe vera
La propagación del Aloe vera es muy fácil y los bebés de Aloe son perfectos como regalos. De hecho, ¡la planta hará la mayor parte del trabajo por ti! Los Aloes sanos producirán hijuelos en su base. Éstas pueden separarse cortando la raíz que las une a la planta madre con un cuchillo limpio y simplemente colocándolas en sus propias macetas.
Riega con moderación hasta que la planta esté establecida y voilà, acabas de multiplicar tu Aloe vera.
Problemas con Aloe vera
- Las hojas de Aloe vera se vuelven marrones. Si las hojas de tu Aloe vera están cambiando de color a un tono pardo o violáceo pero no parecen blandas, probablemente se trate de una coloración por estrés relacionada con la luz. ¿La planta está al aire libre o recibe mucho sol?
La coloración por estrés en sí misma no es nada de lo que preocuparse, pero puede haber un problema si las hojas empiezan a parecer crujientes.
- Manchas negras en las hojas de Aloe vera. ¿Ves manchas negras en las hojas de tu Aloe vera, especialmente en la base? Revisa el programa de riego. Es probable que estés regando en exceso, ¡lo que puede ser fatal para la planta!
Los síntomas del exceso de riego también pueden producirse por falta de drenaje o si no hay suficiente luz y la planta no puede procesar el agua que le estás dando.
- Las hojas de Aloe vera se sienten blandas. Tu Aloe vera podría estar pudriéndose, lo que puede resultar fatal si no tomas medidas.
La podredumbre puede extenderse e infectar toda la planta, así que lo único que puedes hacer en este momento es cortar todas las partes afectadas y esperar que eso acabe con el problema. Además, echa un vistazo a los cuidados que estás proporcionando, porque algo está fallando. ¿A lo mejor el substrato no seca con bastante rapidez? Actúa en consecuencia.
Comprar Aloe vera
El Aloe vera es sin duda una de las plantas de interior más populares por sus propiedades medicinales. Es probable que cualquier tienda de plantas o centro de jardinería la venda.
Fíjate en las plantas que hay en las tiendas locales. Es posible que lleven un tiempo allí y sean de mala calidad, a veces regadas en exceso y sin recibir mucha luz. Comprar Aloe vera por Internet suele ser más conveniente, ya que normalmente están recién salidas del vivero y, por tanto, todavía están en buen estado.
¿El Aloe vera es tóxico para los gatos y los perros?
Aunque el gel de Aloe vera debería ser seguro para las mascotas, otras partes de la planta pueden causar problemas. La capa exterior de las hojas contiene un látex con propiedades laxantes. Esto significa que si tu gato o perro mastica una hoja de Aloe vera, podría experimentar dolores de barriga y diarrea, lo que puede ser problemático si se produce deshidratación.
En resumen, es mejor mantener esta planta lejos de las mascotas curiosas.
Si quieres saber más sobre cómo cuidar un Aloe vera o quieres compartir tus propias experiencias con esta suculenta, ¡no dudes en dejar un comentario abajo!
Fuentes