Una planta de interior con un color increíble (¡púrpura!) que es muy fácil de cuidar y crece en abundancia. ¡Sí, existe! Esta Tradescantia, una «prima» de la popular Tradescantia zebrina, también es conocida como planta ostra. Una planta perfecta para los principiantes y que puede soportar un poco de maltrato.
Sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber sobre el cuidado de Tradescantia spathacea.
Nombre(s) (común, científico) | Planta ostra, Reo, Tradescantia spathacea (a veces Rhoeo spathacea o Rhoeo discolor) |
Nivel de dificultad | Fácil |
Iluminación recomendada | Brillante e indirecta |
Agua | Dejar secar ligeramente |
Substrato | Tierra para macetas |
Tradescantia spathacea: Habitat natural
La variedad verde natural de esta planta se descubrió originalmente en América Central. Hoy en día se puede encontrar en otros países, a menudo «escapada» de los jardines. Como otros miembros del género Tradescantia, es muy resistente y puede ser bastante invasiva.
La forma de crecimiento de la Tradescantia spathacea y su hábitat natural nos dan algunas indicaciones para su cuidado. Se trata de una planta que está acostumbrada a estar a la sombra de los árboles más altos, por lo que prefiere la luz indirecta. Como su hábit es tropical, no reacciona bien a las bajas temperaturas y no apreciará que su substrato se deje secar por completo.
Tradescantia spathacea: Luz & ubicación
Luz
Tendrás que proporcionarle bastante luz para mantener a tu Tradescantia spathacea feliz. El sol directo no es lo ideal, especialmente la luz solar de la tarde. En vez de eso, coloca esta planta en un lugar que reciba mucha luz indirecta.
Condiciones de menos luz no son demasiado problemáticas si no son permanentes, pero puede que observes cómo tu Tradescantia spathacea empieza a estirarse en un intento de alcanzar la luz. Además, si tienes una de las variedades de cultivo selectivo con hojas de color púrpura, podría volver a su color verde natural por falta de luz.
Ubicación
Aparte de su demanda de abundante luz, la Tradescantia spathacea no es nada exigente en cuanto a su ubicación preferida en la casa. Aunque no le gusta el aire demasiado seco, la humedad en una casa normal debería estar bien.
Lo que sí que se tiene que tener en cuenta es que a la Tradescantia spathacea no le sientan bien las bajas temperaturas. Manténgala alejada de las ventanas frías durante el invierno. Aparte de eso, la temperatura habitual en casa debería funcionar bien.
Plantar Tradescantia spathacea
Al igual que con otros aspectos del cuidado de las plantas de ostras, plantar la Tradescantia spathacea es muy fácil. No se necesitan mezclas de substrato complicadas, siempre que el exceso de agua pueda drenar sin que la tierra se seque demasiado rápido. Una solución fácil sería mezclar la tierra de la maceta con una pequeña cantidad de perlita para que drene mejor.
En cuanto a la maceta, como siempre, elige una con orificio de drenaje. Yo prefiero las macetas de plástico de vivero, en lugar de las de terracota, para las plantas como ésta que no necesitan secarse rápidamente. Son baratas y puedes ocultar fácilmente su fealdad con una sobremaceta decorativa.
Regar Tradescantia spathacea
Cuando se trata de regar, la Tradescantia spathacea no es demasiado difícil. Durante el verano, cuando crece activamente, agradece un suelo ligeramente húmedo. Sólo hay que dejar que el primer centímetro se seque antes de volver a regar, lo que probablemente signifique regar unas dos veces por semana.
Esta planta no aprecia la humedad excesiva, así que asegúrate de eliminar el exceso de agua. Es mejor regar poco que demasiado.
Durante el invierno, cuando las plantas de interior no crecen mucho, puedes reducir los riegos. Deja que la tierra se seque un poco más; regar una vez a la semana debería funcionar bien durante este tiempo.
Propagar Tradescantia spathacea
Al igual que sus otros aspectos de cuidado, la propagación de una Tradescantia es muy sencilla. Hay tres formas de hacerlo: mediante esquejes de tallo, división o cultivo a partir de semillas.
- Esquejes: Sí, aunque no siempre lo parezca, la Tradescantia spathacea tiene tallos. Si miras a través de las densas hojas, deberías poder encontrar un buen punto para hacer un corte. Esto puede hacerse con un cuchillo limpio, tras lo cual puedes enraizar el esqueje en agua o tierra.
- División: El mejor momento para hacer esto es si ya ibas a trasplantar tu Tradescantia spathacea, ya que sacarla de la tierra te permitirá identificar los diferentes brotes y separarlos fácilmente. Puedes colocar cada uno de ellos en su propia maceta. Como los hijuelos suelen tener su propio sistema de raíces, deberían seguir creciendo sin problemas.
- A partir de las semillas: Tradescantia spathacea es capaz de florecer en el interior. Si las flores se fecundan, se formará una vaina de semillas una vez que se marchiten, y podrás cosecharlas. Puedes sembrarlas en fibra de coco húmeda y colocarlas en una bandeja de germinación. En pocos días o semanas verás aparecer las plántulas.
Tradescantia spathacea: Abono
Como la mayoría de las plantas de interior, la Tradescantia spathacea agradecerá un poco de abono de vez en cuando.
Durante su periodo de crecimiento (de primavera a otoño) puedes añadir un poco de fertilizante diluido para plantas de interior durante el riego para darle un pequeño impulso.
¿La Tradescantia spathacea es tóxica para los gatos y los perros?
Aunque la especie no es explícitamente tóxica, las hojas de la Tradescantia spathacea contienen una savia irritante que puede lastimar tu gato, perro o incluso tu hijo en la boca y otras zonas que toque. Así que mantén esta planta fuera de su alcance o evítala por completo si te preocupa. Además, ten cuidado al trasplantar.
Si se estropea una hoja, la savia puede irritar las manos, así que conviene llevar guantes si tienes que manipular tu Tradescantia spathacea.
Si tienes más preguntas sobre el cuidado Tradescantia spathacea o quieres compartir tus propias experiencias con esta bonita planta de interior, no dudes en dejar un comentario a continuación.